Ningún país organiza tantos crosses como España. Y hablamos en términos de calidad y de cantidad. De hecho desde hace años, y con buen criterio, la Federación Española intenta limitar las pruebas de campo a través de cada fin de semana para que no se solapen. La voluntad de la World Athletics es también parcelar las distintas disciplinas del atletismo por fechas para lo mismo, para que no coincidan en el tiempo. Su idea es que el aire libre tenga su temporada, y lo mismo la pista cubierta ("short track" ahora) y el campo a través. Sin embargo parece que la ruta es un punto y aparte. No hay más que ver que el fin de semana del último campeonato de España de cross en Getafe hubo hasta cuatro media maratones a la vez, una de ellas en la misma localidad madrileña. El criterio no parece igual para todos.
En esa voluntad por parcelar disciplinas el próximo mundial de cross sera en 2026 en Tallahassee, Florida, el 10 de enero. Habitualmente el nacional en nuestro país es a finales de ese mes y, si nada cambia, habría que echar hacia atrás en fechas ese campeonato y, por tanto, a todos nuestros crosses. Diferentes voces autorizadas han deslizado que a la federación mundial le gustaría que el cross fuera de septiembre a primeros de enero. Nuestra especialidad siempre se jactó de aunar élite y formación. En cada carrera hay un montón de niños y niñas que en septiembre aún no han comenzado siquiera a entrenar porque están volviendo de las vacaciones de verano y aún no estarían preparados. ¿Queremos acabar con eso?.
Insisto, nuestro país organiza más pruebas de campo a través que ningún otro y eso necesita un espacio mayor incluso que el actual porque lo ideal es que las pruebas no coincidan los mismos días. Por ahi igual, independientemente de las fechas en la que la World Athletics ubique sus campeonatos, lo mejor sería utilizar también febrero y marzo para que se disputen crosses y, al igual que ocurre ahora con la coincidencia de pruebas de ruta, que sean los atletas quienes escojan. No pasaría nada por hacer carreras de campo a través después del mundial.
A finales de abril tendrá lugar la Asamblea de la Federación Española y ahí, como todos los años, se hablará del calendario. En el caso del cross hay dos opciones: comprimir todo lo que tenemos entre septiembre o diciembre, con el consiguiente perjuicio por el número de pruebas. O estirar el calendario para una idónea ubicación de todas las pruebas. La decisión en nuestro país debería ir en consonancia a la cantidad de carreras. No es lo mismo - a efectos de cross - España, que otros paises.
Alberto Calleja